jueves, 25 de junio de 2015

Nostalgia cuando vives en un país nuevo

Si me seguís sabréis que todavía no he empezado mi experiencia como au pair, pero os puedo hablar de nostalgia ya que la he vivido en gran medida.

Con 17 años, siendo poco más que una niña, me aventuré y me mudé a los Estados Unidos para pasar un año como estudiante de intercambio, viviendo con una familia de acogida y estudiando en un high school americano. Me fui el último día de agosto a miles de kilómetros de casa sabiendo que no vería a nadie conocido por 10 meses, ya que no se me permitía volver a casa por navidad ni recibir visitas de familiares ni conocidos. Así que os puedo asegurar que conozco la nostalgia. 

Y hay dos cosas totalmente ciertas sobre la nostalgia: es normal sentirla al principio y mejora con el tiempo. 

Si te pasas las primeras noches llorando cuando vas a la cama, o si hay veces en las que te tienes que refugiar en algún lugar para echar un par de lágrimas que no podías mantener dentro no te agobies. ES NORMAL. No solo echas de menos todo lo que conoces, sino que en poco tiempo te tienes que habituar a una gran cantidad de cambios. Un sitio nuevo, una cultura nueva, rutinas diferentes... son muchos cambios para asimilar de una vez y a veces no aguantamos y nos hundimos en lágrimas. 

Lo mejor que puedes hacerte es mantenerte ocupado. Llena tus días de cosas que hacer, en cuantas más cosas tengas para hacer menos tiempo tendrás para sentirte nostálgica. Y en cuanto más canses el cuerpo más rápido te cansarás, evitando esos momentos de nostalgia extrema. 

Otro punto a favor para ti será encontrar a alguien con quien hablar y compartir los sentimientos. Por supuesto que el contacto con tu familia es necesaria y muy conveniente; pero hablar con alguien que esté ahí contigo, alguien que sepa lo que sientes y alguien que te ayude en los momentos de bajón te ayudará mucho más de lo que crees. 

Y por último no te agobies por lo que sientas en esos momentos. Como ya he dicho es normal sentirse así y con el tiempo las cosas mejoran. No pienses en una vuelta temprana por que creas que no te vas a adapta. Date un tiempo para acostumbrarte y ten la mente abierta a los cambios. Puede que entonces te cueste creerlo, pero más adelante llegará el momento de volver a casa y entonces sentirás nostalgia de el sitio que antes sentías tan ajeno a ti.  

domingo, 14 de junio de 2015

Qué meter en tu maleta

Meter en una maleta todo lo que vayamos a necesitar durante un año... Seamos realistas, ES IMPOSIBLE. Por eso debemos hacer dos cosas: elegir y minimizar. 

Habrá muchas cosas que vayas a tener que comprar en tu país de destino y otras cosas de las que acabaras prescindiendo. Pero deberemos de llevar aquellas cosas imprescindibles y demasiado caras para poder comprar una vez en el país de origen:


  • Ropa básica. Sé realista, no vas a poder llevar toda la ropa que quisieras llevar. Una vez hayas llegado acabarás comprando muchas más prendas de vestir de las que esperes y a la vuelta acabarás dejando otras muchas ropas en el país de acogida. Por eso es conveniente elegir unas pocas prendas que te gusten mucho, y sobre todo la ropa que creas que más usaras en tu país de acogida.
  • Neceser. No metas todo lo que vayas a necesitar. Llevar champús, suavizantes, cremas corporales... Te ocupará demasiado espacio en la maleta y son cosas que fácilmente podrás adquirir en cualquier supermercado. Lleva cosas pequeñas y específicas que vayas a necesitar. Y a la hora de llevar planchas y secadores ten en cuenta si podrás usarlos en el país en el que vayas a ir, ya que no todos los países tienen los mismos enchufes. 
  • Ordenador. Si tienes un portátil no dudes en llevarlo. El contacto con tus seres queridos será algo que echarás de menos muchísimo más de lo que imagines, y por eso, los correos, el skype y similares son necesarios, por lo que un portátil, una tablet o algo parecido será más que necesario.
  • Recuerdos. Como ya he dicho, siempre habrá gente a la que eches de menos. Por eso lleva pequeñas cosas que te hagan sentirte más cerca de ellos. Lleva algunas fotos reveladas, regalitos que te hayan hecho, cartas que te hayan escrito como despedida... Lleva cositas que te hagan sentir que los tienes cerca. 
  • Regalos. Aunque no sea necesario, lleva a la familia de acogida algún detalle, ellos lo harán cuando te vayas y llevar algún detalle te ayudará a dar un buen comienzo a tu estancia. Para los niños puedes llevar algún libro o un juguete o alguna ropita si es que son bebés. Para los padres puedes llevarles alguna comida típica de tu país o algún souvenir.
  • Bañador. Siempre viene bien llevar un bañador. Aunque no creas que lo vayas a usar, nunca sabes cuando te puede salir algún plan para ir a la piscina con los niños, o si te saldrá algun viaje a la playa... Un bikini no ocupa nada, y siempre conviene tener uno a mano por si acaso.
  • Accesorios para invierno. Si vas a pasar tu estancia en un país frío llévate un par de guantes y un gorro. No ocupan nada y así la mañana que te despiertes y te des cuenta de que el invierno ya os ha invadido estarás preparada.
  • Medicamentos. No siempre vas a poder encontrar todo lo que necesites en tu país de acogida, y para los primeros meses suele ser conveniente llevar todos los medicamentos que vayas a necesitar en la maleta. 
  • Papeles. No olvides llevar todos los papeles que necesites, incluyendo copias de tu pasaporte, una tarjeta de crédito que vayas a poder usar en el nuevo país y los papeles del visado (si es que necesitas uno). Para todo ello es recomendable llevar una carpeta pequeña en la que meter todos éstos papeles y llevarlo siempre a mano en el viaje. 
  • Un móvil. Obviamente no podrás pasar toda tu estancia utilizando el móvil de tu país de origen. Pero es recomendable llevar uno para el primer día por si las cosas se torciesen.
  • Dinero. No sabes cuando podrás acceder a un banco y hasta que recibas tu primera paga es conveniente llevar algo de dinero en mano para los primeros días. 

viernes, 12 de junio de 2015

A tener en cuenta a la hora de elegir una familia

Hay varios factores a tener en cuenta a la hora de elegir una familia, la importancia de cada factor depende de cada uno, pero realmente recomendaría tener en cuenta cada uno de los putos que mencionaré a continuación:


  • Los padres: Lo primero, y que personalmente considero uno de los factores más importantes, es la actitud de los padres hacia ti. Los perfiles en los que veas un mínimo comentario sobre su deseo de hacer sentir a la au pair parte de la familia son familias potencialmente más adecuadas, ya que demuestran que no sólo buscan una "chacha", sino que están dispuestos a integrarte en su vida y a tratarte como parte de su familia. La conexión que notéis en los e-mails intercambiados es también algo a tener en cuenta. Si ya desde el principio consideras que no vais a encajar, buscad a otra familia. Tened siempre en cuenta que en los primeros días con la familia estarás algo más vulnerable y que una buena relación de confianza con los padres será de gran ayuda en éstos momentos. 
  • Los hijos:  Si eres una de esas personas que siente aversión hacia los pañales sucios y que no soporta los lloros no consideres introducirte en una familia en la que deberás de cuidar de bebés. Al contrario, si no eres una persona activa, que tiene paciencia y que está dispuesta a correr, ensuciarse y a jugar a mil juegos, no busques una familia con niños de edades más avanzadas que necesitan de más entretenimiento. Pasarás más horas con los niños a los que cuidas que con nadie, por eso ten en cuenta qué tipos de cuidados deberás ofrecerles y si podrás hacerles frente día a día. 
  • ¿Dónde viven? Si no soportas el campo y eres una persona de ciudad no consideres irte a vivir a un pueblo pequeño o a una casa apartada de la civilización. Y obviamente, si al contrario eres una persona de ambientes tranquilos y que prefiere la tranquilidad del campo o que disfruta de los paseos sin nadie y que no soporta los barullos, no se te ocurra irte a una gran ciudad. Ambas cosas tienen sus ventajas. Normalmente las familias que viven en sitios apartados tienen casas más amplias y más sitio para jugar, mientras que la mayoría de las familias que encuentres en grandes ciudades vivirán en apartamentos. Por otro lado, el vivir en una gran ciudad significa que tendrás más cosas que hacer, tanto a la hora de salir con amigos como a la hora de hacer planes para los niños; mientras que en pueblos pequeños o sitios apartados las cosas que podrás hacer serán limitadas. 
  • ¿Qué tareas deberás cumplir? La mayoría de las familias te pedirán que los ayudes con "pequeñas tareas del hogar", insiste a la familia para que te especifiquen cuales serán éstas pequeñas tareas. En algunas familias puede que simplemente se refieran a recoger los juguetes que los niños dejen fuera; en cambio, otras veces puede que ésto implique recoger las habitaciones y hacer las camas de los niños, lavar y planchar la ropa de los niños, cocinarles y limpiar la cocina... Ten en cuenta que hay tareas que como au pair nunca se corresponden, las cuales son varias: limpiar y recoger la habitación de los padres, hacer las limpiezas a fondo de la casa, limpiar ventanas, hacer la colada de los padres... Siempre recuerda que ser au pair implica hacerse cargo de el cuidado de los niños, y no trabajar como ama de casa.

jueves, 11 de junio de 2015

Mi familia de acogida

Me siento verdaderamente afortunada de haber encontrado a la familia que he encontrado. Tuve la suerte que poca gente tiene de conocer a ésta familia el verano pasado. Nos pusimos en contacto a través de AuPairWorld (con mucha antelación ya que dimos el uno con el otro un año antes de que yo tuviera prevista mi fecha de salida) y en una conversación me mencionó que veraneaban en un pueblo que está a menos de una hora de donde vivo yo. Hicimos los planes y un día de agosto quedamos para conocernos y inmediatamente conecté con los padres. Con los niños fue más difícil, ya que el pequeño sólo tenía 4 meses entonces y el mayor, de 3 años era tímido y el idioma era un gran inconveniente (ya que él sólo habla francés y yo todavía tengo mucho que mejorar en el idioma).

Desde entonces hemos hablado seguidamente (con un margen de un par de e-mails por semana durante 10 meses y hemos ido conociéndonos mejor. Si cuando conocéis a una familia no tenéis tanto contacto con ellos no os agobiéis, ya que nosotros lo planeamos con mucho tiempo de antelación y normalmente no suele haber tanto contacto entre la familia y la au pair. Sí que es necesario hablar todo lo posible con la familia, un par de conversaciones por skype son más que recomendables y los correos también te pueden ayudar a hacerte una idea de cómo será la vida con la familia, pero un par de meses de antelación son más que suficientes para llegar a conocer bien a la familia.

Volviendo al tema, mi familia de acogida vive en un piso medianamente grande con un jardín impresionante y una terraza decente. Los dos son abogados y trabajan muchas horas, por lo que me han contratado para cuidar a los niños después de que salgan del colegio y de la guardería. Son una familia activa y por lo que me han dicho viajan mucho, por lo que me siento muy afortunada de haber dado con ellos. 

¿Por qué ser aupair?

Desde que conocí el termino aupair y lo que suponía serlo, decidí que eso era lo que quería hacer. Sabía que cuando encontrara el momento haría las maletas y me mudaría a otro país para aprender el idioma mientras cuidaba de unos niños.

Me encanta viajar y me encantan los niños, así que ¿qué mejor manera de combinar ambas cosas que siendo aupair? 


Llevaba años pensando en hacerme aupair, había estado a punto de irme varios veranos, pero por complicaciones para cuadrar las fechas siempre lo iba dejando para otro momento. Mi intención era pasar un verano fuera como aupair mientras estudiaba la carrera, y luego volver a ser aupair durante un año entero justo después de terminar la carrera. 


Al final terminé de saltarme el paso de probar por un verano y he decidido embarcarme en ésta aventura para un año completo. Acabo de terminar la carrera y estoy convencida de que me encuentro en uno de ésos momentos de ahora o nunca, por lo que me he negado a esperar a más adelante. s. 


Pero ésto de ser aupair no es para todo el mundo, todo tiene sus partes buenas y sus partes malas, por eso, os haré una lista de los requisitos básicos que en mi opinión debe de cumplir cualquier persona que desee ser aupair.

  • Tener pasión por los niños. Éste, obviamente es el requerimiento básico para ser au pair. Los pequeños a los que cuides serán las personas con las que más tiempo vas a pasar durante todo el verano, y como ya sabréis, cuidar de niños no es tarea para cualquiera. Mientras seas au pair, serás madre, hermana, amiga y profesora todo en uno, y esta tarea no viene sin trabajo, por eso que si no lo haces con ganas y de corazón pronto te hartarás y optarás por dar por terminada tu aventura.
  • Querer aprender o practicar un idioma. Si vas a un país en el que se habla un idioma diferente al tuyo, para poder comunicarte vas a tener que aprender el idioma. Puede ser frustrante y cansado al principio, pero si llevas las ideas claras y estás dispuesta a aprender y a ponerle ganas pronto empezaras a adquirir el idioma y antes de que te des cuenta serás capaz de entender y seguir cualquier conversación.
  • Tener una pizca de espíritu aventurero. Estar lejos de tus seres queridos, no saber cuando los volverás a ver, empezar desde cero en un país nuevo y además tener que aprender un nuevo idioma para comunicarte con todo el mundo requiere un poco de espíritu aventurero. Habrá veces en las que tendrás que ser fuerte, y veces en las que no aguantes y llores. Pero habrá mil momentos buenos por cada momento malo y con un poco de positividad y esperanza no hay nada a lo que no se le pueda hacer frente. 
  • No esperar hacerse rico. Si lo que buscas es ganar mucho dinero, ser au pair no es para ti. Si lo que quieres es ganar y ahorrar mucho dinero es mucho más rentable quedarse en tu país y buscar algún trabajo de camarera o cajera. Hay familias que pagan más y familias que pagan menos y cuentas con la ventaja de que la comida y el alojamiento van a cargo de la familia, pero siempre hay gastos. Salir con gente implica gastar dinero, viajar a pueblos, ciudades o países cercanos y cuesta dinero y adaptarse a un sitio nuevo y conseguir todas las necesidades básicas implica gastar un dinero. Por lo que si lo que buscas es ahorrar y ganar mucho dinero seguramente lo de ser au pair no sea para ti.
  • Tener ganas de vivir nuevas experiencias. Volverás a casa con mil historias que contar y vivirás mil aventuras que no esperabas vivir. Las anécdotas de ésta experiencia te durarán años y volverás siendo otra persona.Por eso que ser una persona abierta a nuevas experiencias y dispuesta a afrontar las cosas con una actitud positiva tienen una experiencia mucho mejor.

Bienvenidos a todos

¡Hola a todos!



Me llamo Enara, tengo 21 años y en poco tiempo me voy a embarcar en la increíble aventura de convertirme en au pair




Empezando desde ya, os contaré mi preparación antes de ir y mi experiencia una vez me instale con mi familia de acogida para que futuras au pairs, au pairs que ya lo son y gente que esté considerando la posibilidad de hacerse au pair puedan conocer mi historia y hacer las preguntas que vean convenientes.




Siempre que se inicia una aventura surgen mil dudas, mil miedos y mil historias que nos gustaría compartir con otros. Por eso, a quienes me leáis os digo que podéis mandarme preguntas, consejos, e incluso historias que queráis compartir con otros para que yo las publique.